1º EPVYA. El claroscuro.

Efecto que se consigue con una determinada distribución y contraste de luces y sombras en un dibujo, en un cuadro, fotografía, etc.

Para crear volumen es necesario que la luz se reparta, de tal forma que algunos elementos aparezcan muy iluminados, otros menos y finalmente, otros elementos se vean ensombrecidos. 

 

 Para crear volumen en las formas, deberemos tener en cuenta distintas zonas a la hora de hacer el dibujo:

- la sombra propia.

- la sombra proyectada o arrojada.

- la zona iluminada.

- la zona de penumbra.

- El reflejo.

 

 Vamos a comenzar con una sencilla práctica. Haremos una escala de grises utilizando el lápiz de grafito.

Práctica 1ª

En nuestra escala representaremos ocho espacios iguales, que completaremos con distintos tonos que  irán desde el blanco del papel, hasta el negro más intenso que podamos conseguir. Os recomiendo trabajar por capas, sin presionar en exceso con el lápiz, para no saturar el papel.

 

Práctica 2ª 

Dibujar estas figuras, teniendo en cuenta sus distintas zonas de luz y sombra. Comienza sin apretar, con líneas finas y claras.

 

Práctica 3ª

Vamos a intentar dibujar esta manzana. Observa primero su forma básica (una esfera), después fíjate en las distintas zonas que se aprecian en el dibujo (sombras, penumbras, reflejos, etc.).

 

Fijaros en lo que se puede conseguir mediante el claroscuro.

Sin tener en cuenta el claroscuro, no se produce el efecto de volumen.

Teniendo en cuenta las distintas zonas de luz y sombra, el claroscuro, el efecto de volumen es fantástico. Los objetos parecen más reales.

 

Este dibujo se ha resuelto sin claroscuro. El efecto es interesante, pero no se consigue representar el volumen realista.

En este  retrato sí se ha tenido en cuenta el claroscuro, por eso el efecto real está muy conseguido.